Se llama Gabriel… Él se había convertido desde que entre a la prepa en
mi mejor amigo, era el único hombre en quien podía confiar de verdad, me
hacia reír, a veces platicábamos y escuchábamos música cuando se
“supone” debíamos “trabajar en equipos” todo era genial, incluso yo le
contaba sobre los chicos que me gustaban, yo le conté sobre mi ex free
de la secundaria a quien yo aun consideraba ingenuamente mi primer amor
aunque ahora se que yo no había conocido el amor hasta entonces… Me daba
consejos me escuchaba me abrazaba ¡Todo!
Cuando entre al segundo semestre me metí a baile y para mi sorpresa y el de el resto el también fue bastante divertido, todos nos la pasábamos de lujo. Y teníamos que hacer un musical… Regresando al punto, el día de las madres la preparatoria hace un festejo para ese día y bailamos una coreografía de la obra ese día mas tarde les tocó cantar a los chicos que participaron en un concurso de canto en el cual él fue y quedo en segundo lugar. No era la primera vez que lo oía cantar, de hecho la primera vez sentí también un curioso cosquilleo pero no le di importancia.
Aquí fue diferente, de repente me clave en sus ojos y no pude despegar mi mirada de el hasta que dejo de cantar. Supongo que me vi como tonta pero en ese momento yo me di cuenta de que sentí algo nuevo jamás había sentido antes en mi vida. Era emocionante, increíble, fugaz, todo era perfecto… ¿Pero estaba enamorada? ¿Realmente enamorada?
Esa es la pregunta que me hago siempre...